Alpuente celebró el día de su patrón con un cielo azul despejado, un sol radiante y temperaturas que apenas subieron por encima de los cero grados. El jueves se procedió al tradicional volteo de campanas y por la noche se encendieron las hogueras. A la mañana siguiente de nuevo se procedió al volteo de campanas y en la Iglesia de la villa se ofició la santa misa a la que acudieron numerosos vecinos de la villa y de las aldeas. Se bendijeron las naranjas como todos los años y finalizada la misa como manda la tradición se repartieron los frutos. A continuación se procedió a pasear al Santo por las calles de la villa con nuevo volteo de campanas y se procedió a la inauguración de la exposición de grabados de Pilar Garcerá
Por la noche, promovido por la banda Alpuente-La Yesa, se celebró en los bajos de la Casa de la Cultura una cena de sobaquillo. El viento no dejaba de soplar y el termómetro marcaba seis grados bajo cero a pesar de lo cual acudieron numerosos alpontinos. Después de la cena se sirvieron pastas y mistela y la banda nos amenizó la velada con pasodobles y charangas y hasta hubo quien interpretó a Shostakovich y su “Tea for two”. Los vecinos bailaron y todos los pasamos bien en esa fría noche de San Blas.
Muy bien el artículo, salvo que el redactor de éste debe informarse mejor, la banda no es de Alpuente-La Yesa, solo de La Yesa como así rezan sus estatutos, no creo que sea nada deshonroso admitirlo.